La mañana del miércoles 18 de octubre, día del Señor de los Milagros, partió al cielo, Manuel Cielo Flores, gran amigo, compañero de aula en el Colegio Salesiano de Piura (primaria y secundaria) y colega de profesión en la Universidad de Piura.
«Me animo a escribir estas líneas, porque durante muchos años dedicó su tiempo y cercanía en la Casa Inspectorial, trabajando incansablemente en beneficio de las obras sociales de la Congregación. Los Salesianos y compañeros lo llamaban, cariñosamente, Manolo.
En el año 2000, bajo la dirección del Padre Santo Dal Ben como Inspector y del Hermano Antonio Pierobón como Ecónomo Inspectorial, Manuel desempeñó un papel crucial en la creación de la Oficina de Proyectos de la Congregación. Desde su liderazgo, se llevaron a cabo numerosas intervenciones que fortalecieron la misión de las obras salesianas.
Tuve el privilegio de trabajar con él desde mediados de 2002, y lo hice durante varios años, en compañía de otros queridos compañeros, como doña Lupe. Juntos compartimos sueños y dedicamos grandes esfuerzos para llevar a cabo proyectos en favor de los jóvenes.
Me viene a la memoria una intervención conocida como “Proyecto La Leche”, llamado así porque implicó el uso de fondos producto de la monetización de leche en polvo donada a Salesian Missions, por el Gobierno de los Estados Unidos. Gracias a estos fondos, pudimos fortalecer de manera integral las capacidades en todos los centros de educación ocupacional y colegios de secundaria técnica de la Congregación. Además, esta inversión posibilitó la creación del Programa «Valientes para Amar», en el que colaboró otro gran amigo, Raúl Salas. Estoy seguro de que ahora comparten anécdotas juntos en el cielo.
Cabe resaltar que, en esos tiempos, Manolo demostró un gran compromiso en el impulso de la Oficina de Proyectos. Se mejoraron y ampliaron los ambientes, se construyó el comedor y la sala de reuniones. Se adquirieron equipos modernos que eran necesarios para gestionar los proyectos y se capacitó al personal. Su dedicación fue fundamental para lograr estos avances.
Me queda corto el espacio para compartir toda la experiencia vivida con este gran amigo, pero espero que lo dicho motive una plegaria por su descanso eterno».
En Don Bosco, Manolo
Testimonio elaborado por: Juan Pardo, Coordinador Oficina de Proyectos de Fundación Don Bosco
