“Tener un lugar a donde ir, se llama hogar, tener personas a quienes amar se llama familia y tener ambas se llama bendición”.
Con estas palabras, el Papa Francisco expresó la importancia de la Pastoral de la Familia, como misión evangelizadora para ayudar y acompañar a las familias a cumplir su misión en la sociedad. Nadie puede negar que la familia está siendo amenazada y afectada en este tiempo de cambios y transformaciones, sobre todo en las interacciones humanas. Una época marcada por la ausencia de muchos padres en el desarrollo integral de sus hijos, o incluso por el desconocimiento profundo de sus verdaderos sentimientos y vivencias.
El equipo de Pastoral del Colegio está desarrollando el «Proyecto Voluntad», un taller, que consta de tres sesiones presenciales, diseñado para padres de familias del nivel primario. Uno de los aspectos que aborda es la importancia de los periodos sensitivos durante el desarrollo infantil. Si la mayor parte de estos se dan a una temprana edad (gestación -10 años), los padres son los responsables de ayudar a los niños a desarrollar su inteligencia, a través de estímulos y motivaciones correctas para “potenciar un hábito, un valor o una virtud”.
Como educadores y como familia necesitamos reconfigurar las modalidades y estrategias de acompañamiento de los chicos para ayudarles a construir la mejor versión de sí mismos, a desarrollar sus capacidades, tareas y orientarlos hacia una madurez y autonomía equilibradas; haciendo de ellos “Buenos cristianos y Honestos ciudadanos”.
Escrito por: P. Elmer Jaramillo, Animador Pastoral del Colegio Salesiano «San Francisco de Sales»