Esta mañana se escribió un nuevo capítulo en la historia de la santidad en la familia de Don Bosco. En la Sala Sinodal del Palacio Arzobispal de Lima tuvo lugar la ceremonia de clausura de la fase diocesana del Proceso de Beatificación y Canonización del Siervo de Dios Luigi Bolla, sacerdote profeso de la Sociedad de San Francisco de Sales. Con este acto, la Iglesia de Lima cerró formalmente la etapa iniciada en esa misma sala el lunes 27 de septiembre del año 2021, día en que tuvo lugar la apertura del proceso diocesano.
En los pasadizos del Palacio Arzobispal de Lima, los cuadros con las imágenes del P. Luis Bolla y de su labor pastoral en la Amazonía peruana llenaron de emoción y recuerdos a quienes lo conocieron.
«Han sido casi cuatro años de trabajo y de investigación, de examinar los escritos y declaraciones del Siervo de Dios y de recopilar documentos y tomar declaraciones de testigos», afirma David Franco, historiador de la Congregación Salesiana del Perú y Coordinador de la Comisión Histórica.
«Gran misionero salesiano, que dedicó más de 50 años de su vida a la evangelización entre los pueblos Shuar, en Ecuador, y Achuar, en Perú», recordó el P. Vicente Santilli, amigo del P. Bolla y primer salesiano en conocer la Comunidad de Kuyuntza, el lugar que el P. Bolla, “Yánkuam’ Jintia” amó profundamente y al que dedicó toda su vida.
Durante la ceremonia de clausura, el Postulador General de las Causas de Santidad de la Familia Salesiana, P. Pierluigi Cameroni, hizo hincapié en la importancia de continuar difundiendo la vida y el testimonio del P. Bolla, a quien describió como “peregrino de la esperanza”
Como postulador, quiero decir que la causa no termina hoy. Hoy termina una etapa muy significativa, pero continúa, y los invito a continuar en acompañar esta causa
¿Cómo?
- Conociendo y dando a conocer esta figura muy rica, muy significativa.
- Conociendo sus obras, sus escritos.
- Pidiendo al Señor, por su intercesión, las gracias que necesitamos todos, el milagro que se requiere para la beatificación.
Quiero que nos dejemos inspirar por su vida, por su testimonio, por la fuerza con la cual él vivió y entregó toda su vida para el pueblo Shuar y Achuar.
En otro momento significativo de la ceremonia, el Vicepostulador de la causa, P. Jesús Jurado, en nombre del P. Juan Pablo Alcas, Inspector Pronvincial de la Inspectoría “Santa Rosa” de Lima, obsequió el cuadro con el retrato del P. Bolla con pintura al óleo, elaborado por el artista peruano Jesús Morales.
Hoy queremos hacer entrega de este cuadro. Este es el rostro del P. Bolla. Más que un objeto, es un símbolo cargado de memoria, de gratitud y compromiso. Esta imagen representa una historia, una presencia, una inspiración.
Que este cuadro, colocado seguramente en un lugar visible, no solo embellezca el espacio, sino que inspire a quienes lo contemplen a continuar la obra de “Yánkuam”
Finalmente, el Cardenal Carlos Castillo Mattasoglio, Arzobispo de Lima, expresó que el testimonio de Jesús en medio del pueblo, como el del P. Bolla, muestra la santidad que brota de la misión y la cercanía al pueblo.
El P. Bolla se sumerge en el pueblo, se enfrenta a su vida, al testimonio del Evangelio, reconociendo que ya Jesús, ya el Señor está en ellos. Su vida fue testimonio de cómo un discípulo es capaz de acoger al Espíritu y transmitirlo, con esa diversidad, con ese trabajo consensual en los dos países: Ecuador y Perú.
Para tomar en cuenta:
Realizada la sesión conclusiva, ahorra corresponde enviar la documentación del proceso al Dicasterio para las Causas de los Santos, en Roma. Dicho Dicasterio, tras el examen correspondiente, y si así lo determina, propondrá al Santo Padre la consideración del Siervo de Dios Luigi Bolla como Venerable, a la espera de que Dios obre un milagro por su intercesión y pueda ser declarado Beato.
