El 31 de enero de 1898 se cumplían diez años de la muerte de Don Bosco. Ese día, los Salesianos del Perú tomaron posesión del Colegio de la Tercera Orden de San Francisco del Callao, que fue renombrado en homenaje al fundador de los Salesianos. Este hecho marcó el inicio oficial de la presencia salesiana en el Primer Puerto.
Por David Franco Córdova
Historiador de la Congregación Salesiana del Perú
Las primeras escenas de la historia salesiana en nuestro país transcurren en el Callao. Fue su bahía, su puerto y sus calles lo primero que los Salesianos y las Hijas de María Auxiliadora observaron al desembarcar en tierra peruana aquel memorable 28 de setiembre de 1891. Sin embargo, tuvieron que pasar algunos años para que se evaluara con seriedad la posibilidad de realizar una fundación en el lugar.
Gracias a la investigación realizada por los salesianos Cirilo Calderón y Eugenio Pennati, sabemos que el 16 de agosto de 1896 monseñor Santiago Costamagna escribió al Rector Mayor Don Miguel Rúa: “Antes que cualquier otra fundación en el Perú, es preciso pensar en el Callao. Usted sabe que en esta casa de Lima no hay personal, pero yo me arriesgaría a abrir la casa del Callao”. Imbuido por este entusiasmo, Costamagna visitó un local que la Tercera Orden de San Francisco quería dar en propiedad a los Salesianos, para que asumieran la escuela que allí funcionaba.
Monseñor Víctor Álvarez, el futuro obispo de Ayacucho, fue alumno de aquella escuela de la Tercera Orden desde antes de ser transferida a los Salesianos. En 1941 rememoró:
En 1896 [la escuela] comenzó a decaer por carecer de personal dirigente y por falta de armonía entre los profesores. La desorganización llegó a tal punto que se disolvió ese año y cada profesor llevó a sus alumnos para continuar el año escolar en otro local. El que esto escribe, entonces alumno del profesor Dávila, siguió asistiendo a las clases que este señor daba en su casa de la calle Colón.
Fue por ello que los franciscanos optaron por entregar el plantel educativo a los Salesianos. A fines de ese año, monseñor Costamagna en representación de los Salesianos y fray Leonardo Cortez por la Tercera Orden Franciscana firmaron el contrato, cuya copia manuscrita se encuentra en el Archivo Histórico Salesiano del Perú:
La Tercera Orden de San Francisco del Callao establecida en la Capilla de la Inmaculada Concepción, cederá a los Padres Salesianos la propiedad del local llamado Colegio de la Tercera Orden. Los Padres Salesianos se comprometen a dar en el citado colegio la instrucción primaria en sus tres grados a los niños pobres del Callao hasta el número de cien.
Callao, 17 de noviembre de 1897.
Los Salesianos tomaron posesión del Colegio de la Tercera Orden el 31 de enero de 1898, décimo aniversario de la muerte de Don Bosco. Su ubicación estaba donde hoy se erige el Templo Faro del Callao y la adyacente Parroquia Inmaculada Concepción. La primera comunidad estuvo conformada por el padre director Antonio Sani, el padre Elías Maldonado y el clérigo Antonio Paredes.
El Colegio Don Bosco funcionó allí durante cuarenta años, hasta su traslado a su actual sede en la calle García Calderón. La bendición de la primera piedra del nuevo local tuvo lugar el 17 de octubre de 1937 y el traslado definitivo el 13 de marzo de 1939.
El templo adyacente comenzó a construirse en 1948. Fue bendecido el 18 de diciembre de 1954 por monseñor Víctor Álvarez, obispo de Ayacucho, exalumno del colegio y director constructor de su actual sede.