Con fe, gratitud y espíritu de familia, los exalumnos salesianos renovaron su compromiso con María Auxiliadora, recordando que la devoción y la formación recibida siguen guiando sus pasos en la vida cotidiana.
En el marco de la tradicional conmemoración mensual en honor a María Auxiliadora, el Santuario del mismo nombre fue escenario de una emotiva jornada que unió a exalumnos de las tres casas salesianas de Huancayo: Santa Rosa, Don Bosco y María Auxiliadora.
La celebración, que inició a las 6:30 p.m., coincidió con el Día del Exalumno Salesiano y la Fiesta de San Juan Bautista, otorgándole un carácter reflexivo y festivo a la vez.
El acto litúrgico inició con el rezo del Santo Rosario, seguido de la Eucaristía presidida por el P. Saúl Quispe SDB, quien en su homilía recordó el testimonio de gratitud de Zacarías e Isabel por el nacimiento de Juan, llamado a preparar el camino del Señor.
El padre invitó a los exalumnos a vivir esa misma gratitud desde lo cotidiano, con espíritu salesiano: siendo buenos cristianos y honrados ciudadanos.
Durante la celebración, se ofrecieron tres urnas con la imagen de María Auxiliadora, que recorrerán los hogares de los exalumnos, como signo de unidad, protección y devoción a la Madre que aprendieron a amar desde su infancia.
Al concluir la misa, se entregó simbólicamente cada urna a representantes de la Unión de Exalumnos del Colegio Salesiano Santa Rosa, la Unión de Exalumnas y Exalumnos Salesianos de Don Bosco de Huancayo y la Unión de Exalumnas de María Auxiliadora de Huancayo.
Este encuentro reafirma la identidad salesiana en la vida adulta, un lazo que, lejos de romperse, se fortalece con los años y se renueva cada 24 de cada mes con María Auxiliadora.
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