Mario Vargas Llosa: un gigante de las letras universales que pasó por las aulas salesianas

Ayer domingo 13 de abril falleció en Lima el escritor peruano Mario Vargas Llosa, Premio Nobel de Literatura 2010. Exalumno del Colegio Salesiano de Piura y admirador de la Obra de Don Bosco en Chacas, Vargas Llosa nunca olvidó su paso por nuestras aulas, según evidenció en sus memorias.

David Franco Córdova
Historiador de la Congregación Salesiana del Perú

Estudiante Salesiano
En el verano de 1946, próximo a cumplir los diez años de edad, Mario Vargas Llosa se mudó con su madre a Piura, donde su abuelo materno Pedro Llosa era prefecto del departamento. Por entonces José Luis Bustamante y Rivero, primo de su abuelo, era Presidente de la República (sería derrocado en 1948 por el golpe del general Manuel A. Odría, en cuyo régimen ambientaría una de sus obras cumbre: Conversación en La Catedral).
Fue el abuelo Pedro Llosa quien matriculó aquel año a Mario en el Colegio Salesiano de Piura. Siendo la máxima autoridad gubernamental del departamento, su elección resulta significativa para comprender la importancia de los Salesianos en aquella región a mediados del siglo XX.

El escritor recordó así este momento en sus memorias: “El abuelito nos recibió en el aeropuerto de Talara y me alcanzó una postal con la fachada del Colegio Salesiano de Piura, donde me había matriculado ya para el quinto de primaria” (El Pez en el Agua, Barcelona: Seix Barral, 1993, p. 23).

Postal coloreada de la fachada del Colegio Salesiano de Piura cuyo original se conserva en el Archivo Histórico Salesiano del Perú, probablemente muy similar a la recibida por MVLL de manos de su abuelo en 1946.

Sin embargo, su experiencia inicial no fue del todo grata, a decir de su testimonio: “Mi primer encuentro con el Salesiano y mis nuevos compañeros de clase no fue nada bueno. Todos tenían uno o dos años más que yo, pero parecían aún más grandes porque decían palabrotas y hablaban de porquerías que nosotros, allá en La Salle, en Cochabamba, ni siquiera sabíamos que existían” (El pez en el agua… p. 24). Incluso señala que algunos de sus compañeros se burlaban de su acento serrano y sus “dientes de conejo” (Ídem.). Sin embargo, allí también cultivó amistades que mantuvo a lo largo de su vida, como Javier Silva Ruete, a quien llamaba “el gordito” y que sería Ministro de Economía del Perú de más de un gobierno entre fines del siglo XX e inicios del XXI.

Su breve paso por las aulas salesianas marcó un antes y un después en su vida, aunque quizás de una manera distinta a la que hubiesen deseado sus maestros. Allí aprendió, según explicita en su testimonio, el lenguaje profano masculino del que haría gala en su producción literaria. Así mismo, gracias al contacto con su compañero de salón Silva Ruete (a quien, siendo un niño como él, descubrió asistiendo y portando una pancarta en un mitin de Víctor Raúl Haya de la Torre, el líder del APRA) conoció lo que era un evento partidario y experimentó la dimensión política del individuo: otro eje fundamental de su obra escrita y su vida pública.

Durante aquel año escolar de 1946 fue director del Colegio Salesiano de Piura el P. José Sáfarik, catequista el P. Francisco Dañek, y consejero escolar de primaria el P. Mario Genero (Elenco Generale 1946, vol. II, p. 124).

Su admiración por la Obra de Don Bosco
Casi siete décadas después, en marzo de 2013, siendo ya un laureado escritor y ganador del Premio Nobel de Literatura, Vargas Llosa viajó a Chacas (Ancash), localidad ubicada a 3300 metros sobre el nivel del mar, a celebrar su 77° cumpleaños. Había escuchado de la obra del sacerdote salesiano Ugo de Censi (1924-2018) y quiso conocerla con sus propios ojos. Su experiencia quedó plasmada en su artículo “Chacas y el cielo” publicado en el diario El País de España a inicios de abril de 2013.
Al describir el aporte del P. Ugo en aquel paraje de la Cordillera Blanca, reseñó: “Este religioso algo anarquista y soñador es, al mismo tiempo, un hombre de acción, un realizador de polendas, que, sin pedir un centavo al Estado y poniendo en práctica sus peregrinas ideas, ha llevado a cabo en Chacas y alrededores una verdadera revolución económica y social”.

El artículo fue trascrito íntegramente por la Agenzia Info Salesiana (ANS) y la página web de los Salesianos del Perú (https://salesianos.pe/vargas-llosa-publico-articulo-en-la-que-destaco-la-labor-del-p-ugo-y-la-obra-de-chacas/), además de diversos medios de comunicación de todo el mundo. Esto permitió visibilizar la extraordinaria labor de la Operación Mato Grosso en los Andes peruanos y brindó un impulso significativo a la obra del P. Ugo de Censi, fallecido en 2018, en el último lustro de su vida.

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3 COMENTARIOS

  1. Ser salesiano marcó mi vida personal y profesional.
    Estudié y viví en las aulas del Don Bosco del Callao. En el Aspirantado Pablo Albera de Magdalena. Y en las Parroquias del Sagrado Corazón de Magdalena de Moyopampa Chosica.

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